¿Quién es el Anticristo en las Santas Escrituras, la Biblia? ¿De dónde debe proceder?
Primero traigamos a la noticia las citas bíblicas
en las epístolas de los apóstoles donde se nos menciona directamente al
espíritu del anticristo; o a él mismo, y también su equivalente y clara
referencia.
-“Porque aunque haya algunos que se llamen dioses, o
en el cielo, o en la tierra; como hay muchos dioses y muchos señores” (1 Cor
8:5).
-“Hijitos, ya es el último tiempo: y como vosotros
habéis oído que el anticristo ha de venir, así también al presente han
comenzado á ser muchos anticristos; por lo cual sabemos que es el último tiempo...
¿Quién es mentiroso, sino el que niega que Jesús es el Cristo? Este tal es
anticristo, que niega al Padre y al Hijo.” (1 Juan 2:18,22).
-“Y todo espíritu que no confiesa que Jesucristo es
venido en carne, no es de Dios: y éste es el espíritu del anticristo, del cual
vosotros habéis oído que ha de venir, y que ahora ya está en el mundo” (1
Juan 4:3).
-“Porque muchos engañadores son entrados en el mundo,
los cuales no confiesan que Jesucristo ha venido en carne. Este tal el
engañador es, y el anticristo” (2 Juan 7).
-“Empero os rogamos, hermanos, cuanto a la venida de
nuestro Señor Jesucristo, y nuestro recogimiento á él... No os engañe nadie en
ninguna manera; porque no vendrá sin que venga antes la apostasía, y se
manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición (2 Tes 2:3).
-“Y entonces será manifestado aquel inicuo, al cual el
Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su
venida. A aquel inicuo, cuyo advenimiento es según operación de Satanás, con
grande potencia, y señales, y milagros mentirosos” (2 Tes 2:8-9).
-“Y cuando ellos hubieren acabado su testimonio, la
bestia que sube del abismo hará guerra contra ellos, y los vencerá, y los
matará” (Apoc 11:7).
-“Y adoraron al dragón que había dado la
potestad a la bestia, y adoraron a la bestia, diciendo: ¿Quién es semejante a
la bestia, y quién podrá lidiar con ella? Y le fue dada boca que hablaba
grandes cosas y blasfemias: y le fue dada potencia de obrar cuarenta y dos
meses” (Apoc 13:4-5).
-“Y hace grandes señales, de tal manera que
aun hace descender fuego del cielo á la tierra delante de los hombres. Y engaña
á los moradores de la tierra por las señales que le ha sido dado hacer en
presencia de la bestia, mandando á los moradores de la tierra que hagan la
imagen de la bestia que tiene la herida de cuchillo, y vivió. Y le fue dado que
diese espíritu á la imagen de la bestia, para que la imagen de la bestia hable;
y hará que cualesquiera que no adoraren la imagen de la bestia sean muertos. Y
hacía que á todos, á los pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y siervos,
se pusiese una marca en su mano derecha, ó en sus frentes: Y que ninguno pudiese
comprar ó vender, sino el que tuviera la señal, ó el nombre de la bestia, ó el
número de su nombre. Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el
número de la bestia; porque es el número de hombre: y el número de ella,
seiscientos sesenta y seis” (Apoc 13:13-18).
-“Y el tercer ángel los siguió, diciendo en
alta voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y toma la señal en su
frente, o en su mano. Este también beberá del vino de la ira de Dios, el cual
está echado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre
delante de los santos ángeles, y delante del Cordero. Y el humo del tormento de
ellos sube para siempre jamás. Y los que adoran a la bestia y a su imagen, no
tienen reposo día ni noche, ni cualquiera que tomare la señal de su nombre” (Apoc
14:9-11).
-“Y vi salir de la boca del dragón, y de la
boca de la bestia, y de la boca del falso profeta, tres espíritus inmundos” (Apoc
16:13).
-“Y vi la bestia, y los reyes de la tierra y
sus ejércitos, congregados para hacer guerra contra el que estaba sentado sobre
el caballo, y contra su ejército. Y la bestia fue presa, y con ella el falso
profeta que había hecho las señales delante de ella, con las cuales había
engañado á los que tomaron la señal de la bestia, y habían adorado su imagen.
Estos dos fueron lanzados vivos dentro de un lago de fuego ardiendo en azufre”
(Apoc 19:19-20).
Hay otras citas, pero basten estas, y
entendamos que existe un espíritu del anticristo; y se nos acerca un inicuo que
será la encarnación y personificación de ese espíritu satánico. En tiempos de
los apóstoles hubo dos emperadores que en particular abrazaron tal espíritu, de
manera que a los hermanos cristianos les parecía que el advenimiento de Jesús
estaba muy cerca. Uno fue Nerón, y el otro Domiciano; en tiempos de cuando Juan
escribió el Apocalipsis.
-Nerón (34-68 d.C). Un tirano endemoniado que
ejecutó a su propia madre y hermano, sin contar sus actos de sodomía. Todo
aquel que él imaginara que le hiciera ‘sombra’ a su poder como emperador lo
asesinó sin contemplaciones. Tácito (56-120 d.C), senador e historiador del
imperio romano, sabiendo cómo Nerón mandó incendiar la capital imperial Roma,
para después reconstruir proyectos a su antojo, y viéndose bajo la presión del
pueblo y otros políticos, nos hace ver que el malvado estaba contra la pared y tenía
que culpar a alguien. Así nos escribe: “Por lo tanto Nerón, para acallar el
rumor, sustituyó como criminales y castigó con exquisitas torturas a aquellas
personas, abominables por sus vergonzosas prácticas, a quienes el pueblo llama
cristianos. Cristo, el autor de tal nombre, fue castigado por el procurador
Poncio Pilatos en el reinado de Tiberio”. Este escritor es un hombre que veía a
los cristianos no muy diferente que Nerón, así y todo denuncia la astucia con
que el emperador acusa a los cristianos; a los cuales seguidamente mandó que
fuesen quemados vivos, a otros torturados o pasados al filo de la espada; en
fin, no descansó y también decapitó al apóstol Pablo, y Pedro fue por igual
crucificado en Italia... un verdadero anticristo.
-Domiciano (51-96 d.C). Un emperador odioso y
malvado hasta la médula. Anunció una persecución en gran escala en contra de
los cristianos puesto que se negaban a participar en todo tipo de rituales y
ofrendas destinadas a alabar y fomentar el culto al emperador. Acusaba a los
cristianos de ateos, y los persiguió por todos los lugares asesinando a miles
de crueles maneras. Aún en su propia familia asesinó sin piedad a su primo
Flavio Clemens, quien al parecer era cristiano. Fue traspasado y muerto, y a su
esposa, la dama Flavia Domitila (su sobrina directa), la desterró a una isla;
tal como le hizo al apóstol Juan; quien a su vez padeció torturas, según la
tradición.
Desde el mismo nacimiento de Cristo ese espíritu
del anticristo arrancaba sus motores, y es cuando Herodes manda matar a todos
los niños menores de dos años. Y sea de paso dicho, que los evangelios no lo
incluyen, pero desde entonces los infortunios del vicioso tirano no pararon: y
tanto los asesinatos de su esposa, hijos y allegados, como sus abusos y la
forma miserable en que fue consumido, hinchado por gusanos en los últimos días
de su vida; hicieron que sobre esta tierra pagara muy caro su intento de matar
a la primera familia dichamente cristiana. Todo esto sin contar que su desliz no se frenó hasta el mismísimo infierno, y finalmente será también lanzado en
el Lago de fuego agarrado al tobillo del próximo Anticristo universal, junto a
su atormentado Lucifer.
El Anticristo que se nos narra en el Nuevo
Testamento, y según el profeta Daniel, proviene del último Imperio, que es el
resurgimiento del antiguo Imperio Romano; es decir, en el embrión que hoy
llamamos Unión Europea. Al parecer es de origen judío, aún cuando ni él mismo
lo sepa o no lo reconozca frente a las cámaras, puesto que Daniel menciona que
"del Dios de sus padres no se cuidará" (Dn 11:37). Fíjese que
es Dios con mayúscula, y ésta, por igual, era una forma de llamar al Dios de
Israel.
Es lógico, porque el Diablo, cabeza de la
trinidad 666, lo que busca es ponerse en lugar de Dios, y hacer su falso mesías
del mismo origen que Cristo, judío; y así confundir al mundo que lo adora,
diciéndoles que su mesías es igual y mejor que el del Dios Padre.
También será homosexual, aunque no lo acepte
públicamente y lo haga a escondidas, mientras use a una mujer (podría ser mayor
que él), como forma de forjar una imagen más familiar y conservadora. Daniel,
en el mismo versículo nos dice que "no se cuidará... del amor de las
mujeres".
Es también muy importante lo que podemos
encontrar en la Segunda Epístola a los Tesalonicenses 2: 1-12, cuando
los cristianos de entonces, sometidos bajo desprecio y persecuciones junto a
los visibles anticristos gobernando Roma, pensaban que el advenimiento de
Cristo era inminente turbándose por la espera; sin embargo, el apóstol Pablo
(como mirando al final de los tiempos) les advierte que:
“…os rogamos hermanos, cuanto a la venida de
nuestro Señor Jesucristo y recogimiento a él que… no os engañe nadie en ninguna
manera, porque no vendrá sin que venga antes la apostasía, y se manifieste el
hombre de pecado, el hijo de perdición. Oponiéndose y levantándose contra todo
lo que se llama Dios, haciéndose parecer a Dios…Y entonces será manifestado
aquel inicuo, al cual el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá
con el resplandor de su venida. Aquel inicuo cuyo advenimiento es según
operación de Satanás; con grande potencia, y señales, y milagros mentirosos” (2
Tes 1-12).
En otras palabras, la iglesia primero presenciará
la venida de ese “inicuo” al que los cristianos conocemos como el Anticristo.
Los que creen que no estarán aquí, porque el levantamiento de la iglesia se los
lleva, están errando por desconocer las Escrituras y el poder de Dios.
No te dejes engañar por falsas doctrinas, errores
de interpretación, o auto denominados maestros.
Pablo lo advierte muy claro; de la misma manera
que en la Primera Epístola a los Corintios les aclara que los cristianos
presenciarán todo el Apocalipsis hasta acercarnos a la séptima trompeta…“la
final trompeta” (1 Cor 15:52).
Entonces los muertos en Cristo serán “levantados
sin corrupción”; y nosotros los vivos transformados en el proceso con un cuerpo
inmortal…en fracciones de segundos; y tomados hacia El.
La ira será desatada como nunca, igual y superior
a los tiempos del Antiguo Testamento. Entonces la tierra se oscurecerá por unos
días completamente, hasta la gran aparición del Señor con gran luz y gloria,
acompañado de ángeles y su Iglesia.
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Enero, 2020